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Organizada por la RIOC por invitación de la Autoridad de Cuenca del Po y del Ayuntamiento de Parma, en colaboración con la Oficina Francesa de Biodiversidad, se celebrará en Parma, Italia, del 19 al 23 de mayo de 2025. Expertos y responsables del sector de la gestión del agua se reunirán para intercambiar experiencias, retos y soluciones concretas frente a estos desafíos medioambientales.

Entre los principales temas que se abordarán, la sesión 4 se centrará en un reto crítico: alcanzar un buen estado ecológico de las aguas luchando contra los contaminantes emergentes, en el marco de la DMA. Entre estos figuran sustancias como los metabolitos farmacéuticos, los plaguicidas, los microplásticos y los PFAS, cuya presencia en los medios acuáticos plantea graves problemas medioambientales y sanitarios.

La Unión Europea ya ha tomado medidas al ampliar la lista de sustancias prioritarias que deben controlarse y al reforzar las normas de calidad medioambiental. Sin embargo, en 2021, solo el 37 % de las masas de agua habían alcanzado un buen estado ecológico, lo que pone de manifiesto la urgencia de acelerar los esfuerzos para reducir esta contaminación.

Soluciones concretas e innovadoras

Las estrategias que deben integrarse en los planes de gestión de cuencas y los programas de medidas asociados para luchar contra los contaminantes emergentes se basan en varios ejes:

  • La reducción en origen: limitar los insumos en la agricultura, prohibir ciertas sustancias tóxicas y tender hacia el «vertido cero» industrial.
  • La interceptación y el tratamiento: desarrollo de humedales artificiales, instalación de filtros naturales y mejora de las tecnologías de descontaminación.
  • Incentivos económicos: creación de impuestos medioambientales y subvenciones para promover alternativas sostenibles.